La actriz y cantante Julie Andrews, a quien todos recuerdan con cariño por su voz y sus cualidades de actriz en "Sonrisas y lágrimas", "Mary Poppins" ó "Víctor Victoria" decepcionó a muchos de sus fanáticos en el regreso a los escenarios ingleses (su país natal).
Decenas de las diez mil personas que habían pagado hasta 140 libras (161 euros) por entrada para oirla cantar en la O2Arena londinense, abandonaron la función antes de que terminara y algunos pidieron incluso que se les devuelva el dinero.
"Hago todo lo que puedo por informar a la gente de que no pueden esperar de mí algo imposible", aseguró en declaraciones posteriores a la función. El concierto había sido anunciado como "Una tarde con Julie Andrews", pero la artista se limitó a cantar algunos números, desapareció del escenario durante buena parte de la función, dejando cantar a sus acompañantes, y al final leyó algunas páginas de un libro infantil que escribió con su hija.
La actriz británica había advertido antes del concierto, el primero que daba en su país natal desde hacía treinta años, de que su voz no estaba totalmente recuperada de la operación en sus cuerdas vocales a la que se sometió en 1997.
"Hago todo lo que puedo por informar a la gente de que no pueden esperar de mí algo imposible", aseguró en declaraciones posteriores a la función. El concierto había sido anunciado como "Una tarde con Julie Andrews", pero la artista se limitó a cantar algunos números, desapareció del escenario durante buena parte de la función, dejando cantar a sus acompañantes, y al final leyó algunas páginas de un libro infantil que escribió con su hija.
La actriz británica había advertido antes del concierto, el primero que daba en su país natal desde hacía treinta años, de que su voz no estaba totalmente recuperada de la operación en sus cuerdas vocales a la que se sometió en 1997.
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