Una familia disfuncional como tantas, donde el amor filial extinguido dio lugar al espanto. Abuela, madre e hija con un eje central que articula la historia, operar a la abuela quemada con un método nuevo de injerto de piel de chancho.
La abuela no interrumpe su soliloquio radial con sucesivos desprecios a su descendencia, la madre de la nena en tratamiento psiquiátr
ico y con una relación particular con su socia, y finalmente la nena metaboliza esa locura con una autoagresión alimentaria. Las tres van y vuelven de su propio foco, se pierden en la locura y se abrazan a la cordura que narra las canciones de Sandro, amado por las tres generaciones.
ico y con una relación particular con su socia, y finalmente la nena metaboliza esa locura con una autoagresión alimentaria. Las tres van y vuelven de su propio foco, se pierden en la locura y se abrazan a la cordura que narra las canciones de Sandro, amado por las tres generaciones.Grotesca, cómica, inefable, sarcástica y dramática, una historia que finalmente trasluce una ternura impensada en tanta locura. Gran empatía de las tres intérpretes Irma Roy, Dalma Maradona y Mónica Salvador. Termina su temporada mañana domingo en el Teatro Petit Tabarís, Corrientes casi Esmeralda.
Entradas
0 comentarios:
Publicar un comentario